¡Hola de nuevo, amada alma! cómo estás?
Acompáñame en nuestra reflexión del día de hoy:
“AMÉN”
Esta es una palabra realmente poderosa y especial, de la cual hay que cuidarnos. ¿Sabes su significado? Literalmente significa “QUE ASÍ SEA”
Seguramente has visto en todas las redes sociales muchísimos posts o publicaciones en las que las personas comparten fotos de niños enfermos, personas que han tenido accidentes
graves o que están en terapia intensiva en algún hospital.
No sabes cuánta tristeza me da ver como la publicación pide que, para salvar a esa persona, lleguemos (por poner un ejemplo)
a cien mil “AMÉN”
De verdad crees que con esa imagen en mente y escribiendo amén (así sea) ¿esa persona se va a salvar?
Wow.
Si supieran el daño que hacen, no pedirían eso.
Cada “amén” que se le da a ese tipo de contenidos, empeora el estado de la persona, y hasta es probable que, teniendo cura o salvación, más bien fallezca
después de una larga agonía sin ninguna necesidad.
De ser posible, y si se tiene la intención genuina de desear lo mejor para esa persona, lo ideal es colocar una foto donde aparezca lo más feliz y sana posible, explicando
su situación actual y pidiendo por su pronta recuperación, bendiciendo su salud perfecta.
Recuerda que importante es el uso correcto de las palabras.
La próxima vez que entres a tu red social favorita y te encuentres con una publicación como las que describí anteriormente, no des me gusta, no la compartas ni escribas
“AMÉN” impulsivamente; estarás contribuyendo a prolongar el sufrimiento de la persona mostrada, y no se lo merece.
En cambio, comenta que bendices su salud perfecta y su pronta recuperación.
“Una vez que tenemos consciencia de cómo usar correctamente las palabras, vamos construyendo un mejor camino para toda la humanidad, desde nuestro espacio, que es
el único del que somos totalmente responsables y el cual estamos obligados a mejorar cada día”.
Gracias por estar allí y compartir tu tiempo para reflexionar junto a mí.
Hasta nuestro próximo encuentro.
Con amor,
Thavata